EL SPA TG PARTE 4/4

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EL SPA TG PARTE 4 

De camino en el carro podía sentir como el brincoteo de la terrecería movía mis nuevos senos los que juegeteaban con el collar que estaba metido entre ellos, la verdad es que me sentía caliente y traer aquella blusa con escote la verdad me refrescaba bastante pero imaginaba que en épocas de frió igualmente me iba a helar si las usaba

Lo ajustado del pantalón realmente me hacía sentirme segura de cierta manera, no sabía por qué, después de varias horas de viaje nos detuvimos a comer, y pedi la cantidad que siempre pedía pero no pude ni comer una cuarta parte de todo, mi estomago se sentía totalmente lleno y después de la primer cerveza sentí muchas ganas de ir al baño pero no podía apretar mi pene para calmar las ganas por que ya no tenía uno, moví las piernas pero no ayudaba mucho hasta que las cruce como toda señorita y más o menos se calmo, en voz bajita como quien dice un secreto le dije a Sandra que necesitaba ir al baño, ella rio diciendo que era normal en nosotras ir juntas al baño, estando ahí le dije que no sabía cómo orinar, ella desabotono mi pantalón, lo bajo hasta mis muslos con un poco de trabajo y me sentó en la taza, dijo simplemente déjalo salir como siempre, lo hice y salio pero no era como siempre, ya me había pasado en el spa y ahora aquí, el sonido era diferente y como salía también, mojaba bastante alrededor y tenía que secarme, lo que fue un verdadero reto era volverme a subir el pantalón, y después de varios intentos decidimos dejarlo un poco abajo pero dejando la blusa un poco mas colgada para que no se viera, después de esos pocos minutos de andar con tacones altos y de la misma altura de los de Sandra la verdad parecería que los hubiera llevado toda mi vida incluso al salir del restaurante corrí hacia el carro con tacones y me sentía tan femenina que me agradaba ser mujer, aun que sentía todas las miradas de los hombres sobre mí, bueno la verdad sobre mis gemelas que se mesian como bebes en su cuna con cada respirar o al caminar simplemente y mas al correr.

Hicimos una parada mas en una tienda de ropa y después de probarme blusas faldas y vestidos me decidí por uno muy lindo al estilo francés arriba de la rodilla floreado con un cinturón de cuero tejido y con un sweater beige y boina, la verdad no se pero me sentía mas cómoda a pesar de que mis labios se apretaban aun mas a la tanga por las corrientes que entraban por debajo.

Salimos de la tienda y paseamos por la plaza, me encantaba la sensación del viento sobre mi cabello largo, lo sexy que me veía comiendo un helado y hasta como todos los hombres me veían y le causaban celos a Sandra, ella me tomo de la mano y de nuevo me llevo al carro a un paso tan veloz que apenas si podía correr con los tacones, en el carro me dio un gran beso y su larga lengua estaba moviéndose como loca en mi boca mientras que con su mano estaba acariciando todo por debajo de mi vestido, me puso la mano en la vagina y dijo en voz amenazante, tu eres mía y de nadie más, a lo cual conteste, eso sonó tan machista yo jamás te dije algo así mientras estuvimos juntos.

Ella me ignoro y siguió presionado con su pulgar cada vez mas fuerte mi clítoris hasta hacerme gritar de dolor, la abofetee como cualquier niña lo haría y ella dijo “me gustan las que se hacen las difíciles”

Condujo como loca hasta llegar a su departamento donde sin esperar un minuto me desvistió y ella también, pateo el vestido que termino debajo de una mesita de noche y me coloco unas medias y una blusita pegada de manga larga mientras que ella se ponía una camiseta con sostén y unos pantalones de vinil que estaban abiertos en su vagina, abrió uno de los cajones del mueble donde estaba sentada y tomo un consolador tiple, se lo metió ella, el primero en la vagina y lo puso en vibrar, el segundo parecia tener una de esas perillas como de baumanometro asi que lo metio en su ano y lo comenzo a inflar hasta que dio un gemido de dolor o placer no podia decirlo clara mente, podía ver como su cara se sonrojaba mientras intentaba apretar los broches de lo que se convertía en una tanga con pene que también vibraba, ella dijo, esto es muy especial para mí, cada  vez que te penetro el pene que tengo dentro se expande y siento tu misma penetración, así que no digas que el tipo del spa fue rudo porque yo lo soy aun mas

Sin esperar a desvestirme nuevamente metió el pene sobre las medias rompiéndolas mientras que yo sentía algo muy extraño que no sentí la primera vez, vibración dentro de mí mientras que mis senos eran estrujados.

Pasaron 2 horas de sexo donde ella se veía cansada y yo ya me estaba aburriendo de tener tantos orgasmos, al final simplemente estábamos ahí ella y yo, me enseño como ponerme un sosten y como arreglar mi cabello, y aprendi tan bien que quiso tomarme 2 fotos antes de continuar con la siguiente parte del sexo

 

Mientras estaba de pie en tacones ella me jalo de los tobillos haciéndome caer sobre la cama y con su larga lengua comenzó a lamer mi vagina y mi clítoris, lo hacia cada ves mas y mas rápido, era algo totalmente diferente por que estaba teniendo orgasmos pero no estaba siendo penetrada y el sentir esa humedad de su boca haciendo contacto con la humedad que producía mi nuevo cuerpo me exitaba aun mas, con un gran brinco ella se coloco en la típica posición del 69 y aun cuando yo no quería lamer su vagina ella la pego contra mi boca y la restregaba fuertemente incluso lastimando mi nariz hasta que comencé a lamer todo, era acido y salado a la vez un sabor desagradable para mi.

-vamos Mariana lame mas fuerte

-sandra esto no me gusta

-pues yo te estoy lamiendo asi que tu tienes que hacer lo mismo

-Basta Sandra ya basta

-y ahora que pasa

-te amo y estoy muy exitada con lo que estas haciendo y tienes razón ahora soy una mejor persona y mi cuerpo me pide ams y mas de todo lo que tu haces pero siento algo dentro de mi que también cambio y no debio hacerlo, siento que la verdad yo quiero a un hombre, y que el pene que tenga entre las piernas sea el de un chico metiéndomelo hasta el fondo.

-como puedes decir eso eres un hombre por dentro y te gustan las mujeres osea yo

-no, no se si fue la pantalla o que pero la verdad quiero a un hombre y volver a probar su semen que esta delicioso no como ese liquido que te sale y seguramente me sale a mi también, siero probar muchas cosas que no hice contigo con un hombre que quiera acostarse a cada rato conmigo, sentir brazos fuertes abrazandome y tomandome de la cadera para levantarme en los aires, quiero que sea mas alto y tener que usar tacones para poder besarlo mientras me cuelgo de su cuello.

-pero que tonterías estas diciendo

-ya que me convertiste en chica y ahora soy alguien mejor, por que me doy cuenta que siempre debi ser chica ahora quiero que tu te conviertas en un hombre con un gran pene para que me lo metas, dudo que te dejen de gustar las mujeres al convertirte en hombre.

-quiero que te largues de mi casa

-bueno pues al final termino lo nuestro pero aun asi te doy las gracias, gracias por hacerme mujer.

Tome toda la ropa que habíamos comprado y la meti en una bolsa, solo tome un mini short blanco y un sweater negro que hacia verse mas grandes mis senos y Sali, la verdad me sentí liberada cuando sentí los rayos del sol en la puerta mientras me tomaba de los tubos que servían de columnas en ese departamento.

Aun no tenia 1 dia de que me habia convertido en una chica, me habían metido un pene gigante dentro de mi y un vibrador, apenas eran unas horas de que habia comenzado a usar ropa de chica y tacones y expresarme de mi misma en femenino, pero estaba segura de algo, era malo para las relaciones siendo hombre pero habia nacido para ser mujer y mi vida como mujer iba a comenzar ahora mismo pero esa, esa es otra historia.

Continuara en el SPA TG 2