lunes, 3 de septiembre de 2012

MIS VACACIONES CON ELLA parte 1/2


MIS VACACIONES CON ELLA parte 1/2

Cumplimos justamente 2 años de novios al salir de preparatoria, ella acababa de cumplir los 18 y yo tenía un año más ya que mi primaria la terminabas con un año de idioma retrasándome 1 año, yo amaba a Sara, su corazón era tan puro, me aceptaba tal como soy, supimos que éramos almas gemelas cuando nos conocimos en aquella clase de cálculo.

Aun que muchos votamos por el viaje de graduación la verdad ganaron los votos para el baile de graduación, así que Sara y yo decidimos hacer nuestro propio viaje y quizá tener nuestra primera vez, juntos en una habitación con vista a la playa y salir a besarnos en la playa bajo la luz de la luna.
Mi padre tenía su propia empresa y sabiendo que me daría todo lo que quisiera, mi forma de ser era diferente, no le pedía tanto para poder pedir algo cuando realmente lo necesitara como esta vez, pagar todo el viaje, y las playas del pacifico siempre fueron mis favoritas así que le pedi el viaje para 2 personas era un destino paradisiaco y tenia lo que toda chica querida para que su primera vez fuera perfecta

Y después de 3 meses de planeación llego el baile de graduación, ahí estaba Sara con su vestido largo y rojo cubierto arriba por un chal de color negro, la recogí en su casa y la verdad es que casi nunca iba, su mama no me quería, cada comida familiar no hacía más que humillarme y decir que yo no merecía a su hija, aun que al final siempre sucedía algo que yo solucionaba y la señora se quedaba callada pero por dentro sabia que me maldecía por saber más que ella, incluso lo hizo en su cumpleaños numero 18 cuando yo le consegui el mejor pastel que pude y ella se limito a decir que sabría mejor si fuera de chocolate.
 Al final tiro aquel pastel, mi pastel y le dio uno que habia comprado, el mas horrible que comi alguna ves, al final en la cocina ahi estaba mi pastel, y aun que tuviera un poquito de polvo encima sara lo disfrutaba mas que cualquier otro regalo es donde me di cuenta que ella me amaba y yo comenzaba a enamorarme realmente de ella,.




Y bueno regresando a la noche de graduación cual película romántica noventera ella bajaba con un vestido a la rodilla, rojo hecho en seda que le había regalado yo, la fiesta estuvo muy bien, termino en la madrugada y tomamos ese día de descanso antes de salir de viaje, nunca es bueno llegar cansado, con mi mochila lista y los boletos en una de las bolsas me dirigí a la casa de Sara, y ahí estaba esperándome con una cara de tristeza ya que decía que su mama no la iba a dejar si ella no iba.

-no importa amor dile que venga y le pedimos otra habitación
-- disculpa jovencito y crees que los voy a dejar dormir en la misma habitación
-bueno es que nuestros nombres ya están registrados en la reservación
-- pues cambia tu suite de lujo por una con 3 camas o 2 grandes para que yo duerma con mi hija
Con una cara de no había de otra opción me dispuse a tomar el celular y marcar pero la señora nuevamente me interrumpió
--o tenemos otra opción, a lo que llamo inhibidor de sexo
-mama por favor eso no, siempre lo haces
-señora eso suena a castración química
--no jovencito es algo un poco más interesante
-amor ni se te ocurra
-señora si me tomo eso me dejara estar en la habitación con su hija y usted se irá a otra
--tienes mi palabra
Asentí con la cabeza y entonces la señora tomo un pelo de Sara y lo coloco en aquel recipiente con un liquido amarillo fosforescente que cambio de color a un rosa intenso, antes de dármelo de beber me arranco unos cabellos y los guardo en un frasco dentro de la caja fuerte.
Era bastante raro pero su olor que despedía esa cosa era mi favorito de uva, me pregunte si sabía a lo mismo y de un sorbo grande bebí el frasco y era verdad era el mismo sabor uva, así que con un brazo levante mi mochila y le dije a la señora, vámonos para llegar temprano y comprar algo de comer en la terminal antes de irnos y su boleto también hay que comprarlo.
--Aun no
-por que aun no, ya bebí lo que dijo usted lo prometió
--si pero aun no puedes salir así como estas
-como estoy, disculpe no le entiendo
-esa ropa no te queda
Di un rápido vistazo y era correcto mi ropa estaba grande, asustado corrí al espejo mientras Sara se ponía detrás de mí, era imposible había reducido 15 cm de estatura y ahora tenía la misma que Sara, me arranque las ropas rápidamente hasta quedar desnudo y era yo pero más chaparro.
-pero que me hizo
--aun no te hago nada espera y veraz
Era cierto lo peor aún estaba por comenzar,  se sentía como si hormigas recorrieran cada parte de mi cuerpo, de los pies a la cabeza, mis pies se hicieron pequeños y mis piernas se tornearon dando la impresión de que ahora eran más largas, mis caderas apenas si se ensancharon para quedar del mismo tamaño de Sara pero lo que si note de inmediato fue mi cintura que se redujo drásticamente mis hombros también y entonces mis manos y brazos de adelgazaron, las uñas de mis dedos comenzaron a crecer y se redondearon.
Poco a poco todo mi bello corporal comenzó a caer cual hojas en otoño, y mientras caía de mi cuerpo mi pelo comenzó a crecer hasta alcanzar el tamaño de la cabellera de Sara y comenzó a tornarse en castaño caso igual al de ella, lentamente pude sentir y ver como mi pene se iba introduciendo cual plastilina comenzaba a moldearse en una vagina igual a la de Sara suponía porque nunca la había visto desnuda y por último la cara comenzó a cambiarme mientras mis pechos crecían y crecían hasta convertirse en unas bubíes, un ligero bello casi transparente broto en mis brazos y en mi nueva vagina formando una línea dorada bellísima si aun fuera hombre.
Me asuste y grite pero entonces Sara me callo colocando su mano en mi boca.
--con esto me aseguro que no penetres a mi hija
-está usted loca, como voy a penetrar a Sara si me acaba de quitar mi pene
--exacto, ya ves como si funciona jovencita, y no digas ni una palabra mas

Me aventó una ropa idéntica a la que traía Sara, una blusa azul con el escudo de la fundación donde trabajaba su mama de Sara, claro que no sabía ni cómo ponerme todo lo que me aventó, así que Sara me ayudo en la vida me había puesto ropa de mujer, entonces me coloco el sostén y pude sentir como levantaba y sostenía el peso extra en el pecho pero aquellos tirantitos me apretaban y se me encajaban en los hombros, la mini pantaletas se sentía tan rara que estuviera apretada y no sintiera que fuera así, ahí es donde note el no tener nada entre las piernas, lo más extraño fue el pantalón que me dieron, era un poco elástico pero ajustado y el cierre lo tenía atrás.

Ahora en vez de llevar mochila tenía una maleta igual a la de Sara, grande rosa y con rueditas, salimos de la casa, y frente había un gran parque me quede contemplando con otros ojos como si fuera diferente todo, las chicas no me veían ahora eran los chicos a los que les quitaba las miradas, di la vuelta y sentí algo extraño como mirarme al espejo pero no veía mi imagen, veía la de Sara.
La mama de Sara llego y no me pude contener en preguntarle
- y cómo vamos a ir al baile de parejas en el bar, se supone que son hombre mujer
-cállate amor
--bar, cual bar nadie menciono nada de un bar
-mama no es un bar, solo es un baile
--nada de bares ni bailes ni besos, dijo enojada
Nos jalo a las 2 de la mano y nos metió nuevamente a la casa saco inmediatamente una bolsita de una caja, traía un polvo color verde y nos lo aventó a las 2 en la cara, nos cegó por un momento y nos provoco estornudos, pero también algo más.
--no permitiré que emborraches a mi hija para acostarte con ella
-aaachuu, ya habíamos dicho que eso no era posible señora, aaachuu, que nos hizo ahora
-mama pero que hiciste, aaachuu, prometiste que nunca lo volverías a hacer.
-ahora que nos hizo Sara
Sara rápidamente se quitaba la ropa desesperada, así que yo hice lo mismo pero no pude quitarme el sostén, no entendía como las chicas lo usaban, pero entonces me horrorice al ver que Sara se estaba haciendo un poquito más bajita de estatura, luego comencé yo, nos mirábamos una a la otra y pude ver como comenzó por la cara, se hizo más infantil, sus cejas ya no estaban depiladas pero ahora tenía menos cejas, sus caderas comenzaron a desaparecer igual que las mías, y poco a poco nuestras bubíes también comenzaron a hacerse más pequeñas y más pequeñas, el sostén ahora me quedaba gigantesco y ni rellenándolo podía llenarlo, ahora ni siquiera teníamos bello en la vagina y nuestras voces eran de niña.
- Ahora qué diablos nos pasó
-- Ya no tienen 18 ahora tienen 11 años y con esto tampoco beberán
- ahora cámbiense les traeré unos corpiños
-que es eso
-los primeros bras de una chica, cuando aun no puedes ni llegar a copa A

Nos trajo unas maletas más pequeñas y con caricaturas, esto no podía ser peor pero no nos quedo de otra, me subí delante pero ella me regaño, las niñas pequeñas van atrás, me pase con Sara ella realmente se veía triste y se tocaba insistentemente las bubis que ahora tenia, yo me levante la blusa y revise bien lo que ahora tenia, eran unas bubíes de esas que incomodan a las chicas que si bien no pueden rellenar por que se notarían, quedarían mejor apretadas con vendas, aun que nuestros pezones se veían que comenzaban a crecer cual colegiala de esa edad.
Era muy claro que las bubíes eran parte muy importante para Sara, aun que no sabía si lo era por ser mujer o por ser ella en lo particular, la verdad para mi estaba mejor literalmente me habían quitado un gran peso de encima.
El viaje cansado al no ver bien la carretera fue tedioso, a saber cuántos años que no viajaba en la parte trasera del auto, pero al fin después del intenso calor húmedo del ambiente, olor a caña y varias vueltas por cañadas se diviso el mar, azul inmenso y tocando el cielo al fondo.
Pasaron así 2 días, Sara parecía haber vuelto a la edad de la diversión, ella se veía feliz aun que suponía que solo fingía, yo me la pasaba mejor leyendo libros para conocer un poco mas de mi cuerpo, por lo menos estaría 2 semanas así, tenía problemas con todo, la ropa, las faldas largas que no te dejaban dar pasos largos, los bikinis, las tangas los corpiños y sobre todo el ir al baño, era horrible tener que sentarme para orinar, que todo saliera como spray mojando no solo mis partes si no partes de mis piernas y glúteos y sobre todo que al secarme sentía una gran excitación que me tenía que pellizcar con las uñas largas que tenia ahora para que desapareciera, y volverme a secar por que la vagina se había mojado, Sara intentaba ayudarme en las mañanas pero ella tenía sus propios problemas adaptándose a tener nuevamente esa edad, todos nuestros planes se desvanecieron y peor las salidas a bailar o a beber se habían cambiado por ir a ver películas para niños en la playa, quien en su sano juicio llevaría a 2 niñas al cine teniendo tantas cosas por ver en una playa, pero entonces esa noche paso algo, Sara le había presentado un señor a su madre y ella salio dejándonos encerrados en el cuarto, la actitud traviesa de Sara desapareció dejando una mirada que no había visto pero juraría que fue una cara de lujuria por mi cuerpo en panti y corpiño.

5 comentarios:

  1. amiga muchas muchas thanks era justo lo que habia imaginado me muero por leer la segunda parte tqmm eres la mejor

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  2. indira felicidades me encanto la historia pero por que solo 2 partes siento que aun puedes contar mucho

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  3. te felicito! muy buena historia ya quiero que este la siguiente parte... me puedes dar la fecha en cual saldra la 2 parte

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  4. para todos los que preguntaron la segunda parte sale el jueves por que andamos con el proyecto por aca pero si la pongo no se preocupen

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  5. hola que tal cuando actualizaras ya quero leer los proximos capitulos de mi nueva vida y la de mis vacaciones con ella son historias mu interesantes

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