sábado, 18 de agosto de 2012

MI PEOR ESCUELA PARTE 4/5


MI PEOR ESCUELA PARTE 4/5


La primer semana transcurrió calmada, sin problema aun que totalmente hinchada tanto en la cara como en todo el cuerpo, pero conforme fue terminando la semana el color rosa regresaba a su piel, y sobre todo su piel parecía cambiar cada día gracias a las altas dosis de hormonas que le dábamos, 10 veces la cantidad recomendada para un adulto pero pensamos que eso le haría recuperar los 4 años que ella no las había producido, también realizamos una operación para achicar sus pies 3 tallas.
Comenzamos la segunda con una depilación laser a todo el cuerpo, a pesar de que la piel en ciertas partes seguía un poco hinchada desaparecimos todo el vello de sus piernas que comenzaba a salir después de Cecilia se las había depilado la semana pasada, aun así lo hicimos además de un manicure sencillo, solamente quitar la cutícula y revisar que sus uñas crecieran correctamente, mientras seguimos inyectando altas dosis de estrógeno, comenzamos también con la expansión de los implantes, diariamente comenzamos inyectando 20 cc lo que es igual que 20 mililitros, los primeros 2 días no se noto pero a partir del tercero se comenzó a notar ligeramente levantado su pecho.
Su tercer semana comenzó con el blanqueamiento químico de sus pezones y aureolas aun que ahora se veían un poquito restirados por el nuevo abultamiento que tenia, se veía cual colegiala cuando apenas estaban creciéndole las bubis, al final lo máximo que pensábamos ponerle eran 320cc o 320 mililitros en 16 días, menos de medio kilo por seno, lo que correspondía a una talla 34 A, también comenzamos a notar como su masa corporal y su peso había disminuido bastante, era la dieta del coma, seguro que muchas empresas para bajar de peso la recomendarían, aun que para su nuevo físico le convenía, esperábamos no tener que ponerle implantes de cadera, aun estando en la pubertad y con los niveles de hormonas en las dosis matutinas que pensábamos mantener por 2 años, esperábamos a los 16 años pudiera desarrollar una cadera propia, sus uñas de las manos ya se notaban algo largas pero aun no lo suficiente para una chica y la podóloga seguía realizando manicuras en sus pies para evitar que se enterraran sus uñas de esos dedos, al final de la semana sus pezones ya estaban de un tono más acorde con el tono normal de una chica aun que su pezón aun era muy pequeño esperábamos que también las hormonas hicieran su trabajo, el verdadero problema sería que lo aceptara.
La última semana comenzó con una falla respiratoria que logramos controlar aun que estuvo sin oxigeno casi 5 minutos esperábamos que no tuviera problemas después pero lo importante fue que completamos las 16 expansiones a su pecho donde la piel se veía restirada pero bien, sus uñas ya por fin tenían el tamaño adecuado lo que hacía que sus dedos se vieran más largos aun que ya lucían bastante delgados por su dieta, su cintura había disminuido 3 tallas y ahora sus senos se veían bien aun que seguían siendo de una medida A quizá A+ o B- pequeños pero acordes con su edad, suponíamos que cada año realizaríamos expansiones ahora que su musculo pectoral y su piel se adaptaran no solo al peso si no a su nueva forma, reconectamos también su intestino para que comenzara a funcionar nuevamente con las comidas, la manicurista decoro sus uñas perfectamente sin ponerle uñas de gel y terminamos la segunda depilación laser en todo su cuerpo y en sus cejas, colocamos unos lindos aretes en los agujeros que ahora tenia y solo nos preparamos para despertarla, ya había perdido mi empleo de directora por estar con Juan pero no me importaba no iba a permitir que algo saliera mal, ahora el problema sería cuando regresara a clases, que sucedería, no me quedaba más que inyectar la solución que lo traería de nuevo a la vida como decimos aquí en el hospital y así cada uno de los mililitros de la jeringa entro en la intravenosa, corriendo rápidamente hasta su brazo, estaba a punto de despertar.
///////EL DESPERTAR////////
Abrí los ojos, el intenso color blanco me hizo cerrarlos nuevamente, la intensa luz blanca me atravesaba los parpados como antes no lo hacía, a lo lejos se podían escuchar altoparlantes llamando a un doctor al cubículo 4, se podían escuchar pasos alrededor mío, supuse que estaba en un hospital, aun no quería abrir los ojos, quería hacer memoria pero no podía, algo la nublaba lo último que recordaba era estar siendo atado a una silla en la biblioteca, algo debio salir mal, me lleve la mano a la cara pero me rasguño, lleve mi mano derecha a la izquierda y pude notar que tenia uñas largas, abrí los ojos nuevamente pero esta vez no los cerré, el intenso color blanco pronto dejo a la vista unas grandes lámparas de neón que estaban a todo lo largo de la camilla donde estaba, tubos de oxigeno salían de la pared y bajaban a mi cabeza, un suero se alcanzaba a ver sobre un soporte de metal en la pared, intente levantar mi cabeza pero no pude, estaba demasiado metida en la gran y suave almohada de mi cama, los hospitales no suelen dar almohadas así, alguien me visito así que llevo más de 1 día aquí.
La cama comenzó a subir con un gran ruido y frente a mi estaba josefina, con un uniforme quirúrgico y bata de laboratorio, intentaba hablar pero algo me lastimaba la garganta
-despierta dormilona, sabes donde estas
-yo aun me sentía mal por no poder hablar así que le pedi un papel y pluma, estoy en un hospital, algo debio salir mal en la biblioteca, que paso?
-un terremoto sacudió la ciudad, de hecho nadie murió pero tú fuiste la única herida gravemente, los estantes de la sección antigua cayeron sobre ti y te causaron un gran daño que logramos reparar en su mayoría, tuviste que ser puesta en un coma inducido.
-acaso estoy paralitico o que paso, no puedo moverme mucho no puedo enderezar la cabeza, estoy completo y porque te refieres a mí como chica, escribía rápidamente aun que hacia el mayor de los intentos para hablar pero las palabras no salían de mi boca.
-tu manguera de oxigeno se enredo por eso no puedes levantar la cabeza y debes estar un poco lastimada por el tubo que tenias en la garganta por eso no puedes hablar, además de otras cosas que tienes en la garganta, enseguida te lo explicare pero necesitas calmarte, estas casi completa me refiero a ti como chica por que, por que, mi niña por que
No lograba terminar las palabras y podía sentir la aflicción en su voz, entonces otro doctor entro y dijo, lamento mucho decirle que sus heridas fueron muy serias, tuvimos que reconstruir muchas partes de su cuerpo en este tiempo, también sus pies estaban rotos y los reparamos.
-cuanto he estado aquí
-1 mes, reparamos su nariz su mandíbula pero tuvimos que extirparle varias costillas que no podían recuperarse, logramos salvar su pierna ya que tenía una silla atravesada en ella pero una de las estanterías aplasto otro órgano y tuvo que ser removido, su madre tomo la decisión de realizar un procedimiento para darle una vida funcional a futuro, quiero que veas esta jeringa, va a ser un tanto desconcertante lo que vas a ver pero debes estar calmada o este medicamento va a sedarte , si me entendiste asiente con la cabeza y te desenredare, si no tendre que sedarte nuevamente.

-no tenia mas opción tenía que aceptar, si era algo totalmente grave no tendría más opción que ponerme como loco, lograron salvarme la pierna, pff patrañas, seguramente ahora vería unos muñones, o me mostrarían un espejo y estaría desfigurado, que podía ser peor que ir a una escuela de niñas, si lo pensé rápidamente ir desfigurado a una escuela de niñas.
El doctor con cuidado quito las mangueras de oxigeno y fue algo raro no había sentido la sensación del oxigeno en mi nariz, fue como si me quitaran 2 tubos completamente fríos y respirar el aire normal, el aroma del perfume de josefina me alivio un poco, al menos mi rota nariz servía, el clima estaba cálido a pesar de la delgada bata que traía entonces levante mi cabeza un poco y pude ver los dedos de mis pies, los moví y vi que eran los míos pero entonces note que estaban delicadamente pintados, baje un poco la cabeza y pude ver mis rodillas, aun estaban ahí era perfecto, solo habían querido asustarme, pero entonces un mechón de cabello se deslizo por mi cara, levante la mano y pude ver que era más delgada y con uñas largas y bien pintadas, intente agarrar el cabello pero las uñas me lo impidieron, era el color de la peluca de mi padre, intente girar la cabeza y entonces sentí como algo jalaba mi oreja, acerque la mano y eran aretes, parecía una pluma y si atravesaban mis orejas, baje rápidamente las manos, mi estomago estaba ahí pero era más delgado, subí las manos, grite, mi grito sonaba como el de una chica, dios que me han hecho dije y totalmente sonaba como una chica, tenia pechos de chica, me enderece podía ver esos bultos, pequeños pero los tenia ahí y pude sentir por primera vez su peso colgando de mi pecho.
-son unos dementes que me hicieron, dije pero mi voz seguía sonando totalmente femenina,
Había un espejo en la pared, casi no escuchaba a los doctores que decían que me sedaran, me acerque al espejo y no me encontré, sin embargo al levantar la mano pude ver que aquella chica, con linda cara, una cintura delgada y pechos casi perfectos era yo, arranque la bata con dificultad por las uñas, todo lo que quería agarrar ahora lo tenía que hacer con las yemas de los dedos, la arranque por fin para descubrir que se había ido, no había notado nada raro abajo hasta que me quite la bata, casi no tenia cicatrices, mis piernas estaban delgadas, y esa vagina parecía muy real, casi como la de Cecilia, mis pechos eran redondos y perfectos cuando pude ver que mis negros y obscuros pezones ahora eran claros y rosados, por lo delgado que estaba y lo restirado de mi piel mi cuello se veía totalmente delgado, mi cara más femenina, mis grandes quijadas habían desaparecido, ahora tenía una barbilla más larga y mis pómulos eran más redondos y pequeños, mi frente era menos pronunciada y sin las entradas que solía tener, y no era por la peluca ya que esta ahora estaba un poco desajustada dejando ver mi verdadero cabello, parecía totalmente una chica cuando me sentí un poco débil, aun mas de lo que me sentía josefina se acerco por detrás y me detuvo para evitar que callera ahora que yo volvía a dormir.

Desperté, no había una gran luz, solo la poca luz que venía de un contacto en la pared y de los monitores médicos que estaban ahí, alguien agarraba mi mano, y despertó al sentir que me movía.
-has despertado, estuviste dormido casi 14 horas
-josefina que gusto escuchar tu voz, tuve una pesadilla muy horrible, solo que despertaba y era una chica, con una voz aguda. El miedo invadió mi cuerpo, estaba escuchando aquella voz femenina con cada palabra que pronunciaba, era dulce, suave, sensual podría decir, no fue un sueño mencione al final con la voz entrecortada y llorando, un sentimiento se había apoderado de mi.
Josefina entonces encendio el reflector y me reviso que todo estuviera en orden antes de decir:

-lo siento mi niña, yo me opuse pero tu madre insistió, no habían más opciones, renuncie a la escuela para estar junto a ti y que por lo menos hicieran el mejor trabajo posible, se que nunca me perdonaras, pero ser chica no es tan malo, algún día conocerás a algún chico y te casaras.
-qué?? Besar a un hombre,
-bueno puedes ser lesbiana, puedes ser lo que tú quieras, pero ahora solo me queda decirte todo lo que tendrás que hacer, sonara como castigo por que tendrás que hacer esto de por vida pero a pesar de todo no es tan malo
-y que dijo mi padre, porque no se opuso a esto, dije mientras tocaba mis nuevos senos
- llego al final de la cirugía, se encontraba de viaje si recuerdas y tardo 12 horas en llegar aquí, ya no pudo hacer nada
-y tu josefina por qué no hiciste nada, me hubieras dejado morir, y porque estoy llorando, yo no lloro.
-tienes un desbalance hormonal, tus testículos y tu pene quedaron licuados cuando un estante de media tonelada cayó encima de ellos, tuvimos que remover costillas intestino incluso, reconstruimos tu cara, tuviste más de 20 fracturas, es un milagro que estés viva
- y ahora que a qué escuela voy a ir, ni siquiera sé qué día de la semana es.
-justo ahora podríamos decir que ya es jueves
-ayúdame a quitarme la ropa, quiero verme.
Josefina acepto, y ahí estaba, era el cuerpo de una chica, apenas se notaba una delgada línea un poco más clara que toda la piel  que corría transversalmente en mi abdomen, con un espejo pude ver mi nueva vagina mientras que Josefina me explicaba que era de una donante muerta, aun que solo era el exterior, toque mi nuevo clítoris y sentí algo raro, no se podría decir que fue como muchas decían un chispazo de placer, se sintió como mover de lado a lado mi pene erecto, aun que supuse que fue porque estaba conectado a las terminales nerviosas y entonces una sensación muy rara me invadió, algo dentro de mí y en mi vagina se endurecía, respiraba entrecortadamente, le dije a josefina que revisara y después de dar un pequeño vistazo con un espejo vaginal el cual se sintió completamente raro, y frio dijo no tienes nada, lo poco que quedo de tu pene lo usamos para crear una bolsa, para el espacio de tu vagina, así que si te excitaste estas teniendo una erección, aun que internamente ahora.
No lo podía creer me sentía violado por mi antiguo cuerpo, sin embargo josefina se paso diciéndome todo lo que tenía que hacer, hasta el punto donde llego al dilatador, desde luego que no me voy a meter eso, es más grande que lo que yo tenía entre las piernas y entonces al cerrarlas fue el momento en que note todo el vacio que estaba ahí, mis muslos se tocaban entre sí sin nada en medio.
Aun que josefina ya estaba llamando a las asistencias por qué pensaba que necesitarían sedarme nuevamente, solo me acerque a la ventana del hospital, se podía ver los grandes jardines que poseía y donde seguramente en el día los pacientes paseaban para recuperarse, ahora solo alumbrados con faroles de neón, un toque modernista pero nada clásico y nada romántico.
-Juan solo necesitamos saber cual será tu nombre, debes elegir un nombre no solo para tu nueva identidad, necesitas uno acorde con tu nuevo género, lo sé pero odio esto, de verdad crees que las hormonas me acercaran mas a ser chica, crees que con todo eso alguien que me vea en la calle no sabrá que soy chico, no dirán miren a Juan por la calle, se metió a un colegio de chicas y le gusto ser una.
-Mira tienes el más moderno implante que regula tu voz, solo intenta no golpearte la garganta, tus bubíes crecerán contigo hasta el punto que tú quieras, tus caderas se ensancharan porque aun eres adolescente y nadie vera tu manzana de anda por que te la quitamos.
-realmente pensaste en todo josefina, y mi padre que quiero verlos.
Y así josefina los llamo, eran las 6 de la mañana cuando estaban llegando al hospital, me había negado a recibir las dilataciones a pesar del riesgo que me mencionaron, no lo permitiría, con lo que solo quedaron las hormonas, inmediatamente que inyectaron aquel liquido mi cuerpo se sintió con calor, eran bochornos, lo único positivo que ahora podía ver era que no tendría los dolores premenstruales, no me desangraría cada mes, ahorraría en ese sentido al no comprar toallitas, no quedaría embarazada, y sobre todo podría comer lo que quisiera sin engordar y perder ahora esta bella figura que tenia.
Mi padre al entrar y verme en bata aun sentada en la ventana viendo el amanecer, dijo que ya no era su hijo, se acerco y aguantándose el dolor, me dio un beso en la mejilla, lo siento pero ya no eres una parte de mí, no te quiero ver en la casa, vieja dale su maleta.
-pero amor es nuestra hija
-no tenemos una hija, eso te enseñara a no tomar decisiones sin mi
--pero papa mencione con lagrimas, que voy a hacer
-por lo mientras olvidarnos y buscar un lugar para vivir.
Salieron del cuarto dejándome sola, abrí la pequeña maleta y había ropa femenina, aun que no quería usarla no tuve más opción, era eso o quedarme con una bata de hospital, para mi mayor enojo, solo habían pantis, así que tome unas y las subí, pero esta vez nada estaba apretado, nada dolía, nada se salía por los lados de la panti, y aun que no quería porque ya lo había usado, me puse un sostén, pero esta vez se sintió diferente, sentirlo en toda mi piel y no solo en las varillas hacia que el peso realmente se sostuviera, claro que ahora los molestos tirantes se encajaban mas pero era una gran ayuda el usarlo, me puse una blusa que estaba muy grande parecia vestido pero no me importo asi que me lo puse y quedo perfecta de blusa, era de color dorado, nunca pensé que eso me quedaria bien y sin embargo entro y ajusto muy bien, y logre encontrar un pantalón y unas calcetas al tobillo para los tenis que ahora eran blancos con líneas rositas, y lo que no me había dado cuenta es que mi pie era más pequeño, cavia perfectamente en un tenis del numero 5 siendo que yo calzaba normalmente del 8. Por último saque una sudadera, era un poco corta y me quedaba en el ombligo y las mangas arriba de los codos, saque por ultimo una bolsa bastante grande casi como maleta pero se podía colgar de lado, metí el vestido las 2 faldas la media docena de pantis y bras que habían calcetas y los zapatos de tacón, me la colgué de lado y pude notar como la banda que pasaba por en medio de mis pechos hacía que resaltaran mas, era algo raro ver mis senos y que no me los pudiera quitar.


Me escabullí, ya no tenía nada que hacer ahí, mi madre no me había defendido, incluso me había arruinado la vida para siempre, mi padre no me quería y josefina había contribuido en todo, solo me quedaba mi amiga Cecilia, iba de camino a verla, no tenía dinero para un pasaje así que iba a caminar las 40 cuadras que más o menos había entre ese hospital y su casa, al pasar por la zona de antros mis pesadillas regresaban, las rudas iban saliendo borrachas de uno de esos antros acompañadas por 3 tipos que solo querían burlarse de ellas.
-Juan hey si tu Juan, por que no estás muerto, hip, nos expulsaron por tu culpa de la escuela
No podía creerlo, me había reconocido, como era posible, ni yo mismo me había reconocido antes pero solo me quedaba salir haciéndome el loco de ahí.
-Que crees que no te reconozco, me obligaron a irte a visitar a diario, por fin mi castigo termino ayer maldito.
Así que por eso me había reconocido, inmediatamente sentí un fuerte tirón sobre mi mano y fui empujado hacia la camioneta que se encontraba estacionada.
Y que hiciste niñito de mami, te pusiste unos globitos en tu brasier, dijo uno de ellos mientras abría mi sudadera y rompía con fuerza mi playera, quería huir pero no tenía la fuerza necesaria, la había perdido durante mi larga estadía en el hospital.
-oye pues a mí me parecen bastante reales, vieja idiota debes estar muy briaga que nos hiciste confundir a esta niña.
-claro que no, hip, revisa su cintura debe tener 3 cicatrices que casi no se notan
-si si las tiene, dijo el segundo de ellos mientras metía su mano en mi pantalón, quise hacerme para atrás pero solo estaba la camioneta
-pero si tiene coño esta niña, estas borracha
-que no, por esta, una muerta le dono todo, así que esta virgencita.
Me subieron a su auto y me amordazaron nuevamente, porque todos querían amordazarme, ahora que tenía una voz femenina, si hubiera sabido la hubiera usado para disuadirlos, pude ver como pasaban la casa de Cecilia, y 3 cuadras después se metieron en un hotel de paso.
Uno de ellos roció un liquido amarillo en un pañuelo y me lo acerco a la cara, pronto pude sentir como mi cuerpo no reaccionaba, era peor que cuando desperté, sentía todo el cuerpo pero no lo podía mover, estaba totalmente a merced de ellos, que seguían amenazando a las chicas que si no era quien ellas decían ellas serian las violadas, me asuste, violada, me réferi a mi misma como chica, tener a un hombre entrando y saliendo dentro de mi cuerpo, si pensar en matrimonio era horrible ahora con esto estaba segura que iba a ser la peor experiencia de mi vida.
Me recostaron en la cama y me quitaron toda la ropa, ellos observaban todo, una de las chicas le menciono que en el centro del tórax tenia los expansores para los senos y cuando uno de los chicos toco pude sentir debajo de mi piel 2 pedazos de plástico supuse yo, meticulosamente se acercaron y abrieron mis piernas, se asomaron iluminando aquellas partes que nunca toca el sol con su celular y dijeron si es un hombre, tiene todo cosido en pedacitos.
Ahora si sabrás lo que es ser una mujer dijo el primero de los tipos, bajándose los pantalones, parecía algo anormal, era más grande que el dilatador que me rehusé a meterme, pero entonces la ultima chica dijo, espera, pero él no lubrica, tienes que meterle algo, de su bolsa saco crema de manos y entonces se unto esa crema rosita con olor a coco en todo su miembro que ahora parecía palpitar a cada latir de su corazón, y sin piedad lo metió entero y hasta el fondo, podía sentir su piel tocando mi nuevo clítoris y entonces recordé que no había ido al baño, sentí muchísimas ganas de ir sin embargo de una forma diferente, pude sentir un gran chorro saliendo y rebotando en aquel hombre mojando todo hasta mis glúteos, miren la pequeña nena ya se éxito, así que lo metió unas veces más hasta que comencé a sentir aquello de nuevo, una erección interna, entonces su pene quedo atorado por la gran contracción de mi nueva vagina, esta súper apretadita, ya no puedo meterla, quítate dijo el segundo, que untándose de crema lo metió completamente, lagrimas rodaban por mis ojos ahora si sentía dolor, dicen que toda chica siente dolor en su primer penetración, pues yo también lo sentí, era intenso y a la ves exitante, pero me provocaba asco solo de pensar en eso.
Después de varias horas me dejaron llena de semen, las bubis, mi nueva vagina, la boca, era algo desagradable, viscoso y salado, en cuanto me pude mover fui a la ducha y me di un baño, me sentía devastada por esto, había dejado un gran vacío en mí, me vestí, se habían llevado todo solo estaba el vestido rojo y los zapatos de tacón, el viento se colaba hasta mi nueva vagina, era mas horrible que cuando era hombre, no tuve más opción que ponérmelos y camine las 3 calles hasta la casa de Cecilia, estaba vacía, toque muchas veces y entonces quise llorar, pero no tenía nada con que secarme las lagrimas así que lo contuve lo mas que pude, la casa de josefina estaba a 1 calle justo frente a la escuela, camine y toque el timbre, no tenia otra opcion no tenia a quien mas recurrir.


Mi niña que te paso estas bien, dijo mientras comencé a llorar descontroladamente, no estoy bien, quiero desaparecer, mis papas no me quieren, me acaban de meter un pene y me dejaron abandonada solo con esta ropa y estos tacones me están matando, no estoy bien, quiero desaparecer, ya no más.
Mi niña, me entere de tus padres pero mira me ofrecieron reubicarme en otro estado, en la misma escuela, podrías venir como mi hija, iniciar una nueva vida juntas, siempre desee tener una hija pero soy estéril, que dices, y así podemos escogerte un nombre bonito, te enseñare todo lo que se
Una nueva vida, ni siquiera puedo imaginar esto, me lo hubieras podido decir en el hospital, y del nombre no se me ocurre ninguno y a ti
Si hubiera tenido una hija le hubiera puesto Jimena como siempre me hubiera gustado llamarme a mí.......



gracias a todos los que han comentado esta mini serie de mi peor escuela, he intentado complacer a todos un poco con las ideas que aportan, y si lo se la chica no es la misma en las fotos pero conseguir fotos de la misma chica en las situaciones que se necesitan es imposible, sin embargo aun asi espero les guste, por cierto se acerca la publicacion 400 de este blog, el final de esta historia sera la publicacion 399 y la 400 sera una pequeña reseña que he escrito ya que sigo el blog desde que se creo, se que les gustara

3 comentarios:

  1. wow nadie lo hubiera podido escribir mejor que tu. Te amo indira. Amo tus historias

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  2. exelente amiga, y la verdad si le das un buen toque a la historia con las fotos, la verdad no importa que no sean de la chica, el punto es que nos lleves a adentrarnos mas en la historia, sigue asi espero con ansia el final

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  3. super historia pon el final porfa

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